Cetli surge nada más dejar atrás la localidad y su bullicio turístico por la carretera que lleva a las ruinas de Cobá. En el interior, las paredes blancas cobran vida gracias a cuadros de colores y antigüedades, mientras que las mesas y sillas de madera ponen un toque rústico. La chef Claudia Pérez Rivas propone aquí una auténtica experiencia maya, con generosos y sabrosos platos tan coloridos como el arte que decora las paredes. La carne y el pescado son la principal inspiración de platos como el istak, un filete de pescado pochado en agua de mar y rociado con un denso y no demasiado dulce mole blanco, elaborado con almendras, perejil, salsa de chocolate negro y semillas de sésamo. El nimbe, una tortita de vainilla y chocolate rellena de helado, es un postre rico y delicioso.